Cuidar tu salud digestiva en verano puede es fundamental para gozar plenamente de tus vacaciones

¿El verano te crea problemas digestivos?

By Maria Llamasnutricionista integrativa en Alma by Women

¿Has notado que tu salud digestiva empeora en verano?

En estos días de calor seguramente te apetecen más comidas frías, picantes, sales más a comer fuera, tomas algo después de trabajar, barbacoas con los amigos, sudas más… Todo esto puede hacer que tu sistema digestivo se revele ¿Por qué? Por varias razones: te sales de tu rutina habitual muy a menudo, tanto en horarios como en tipo de alimentación, la comida está a temperatura ambiente demasiado tiempo y tu sistema digestivo se vuelve más sensible en esta estación. 

La deshidratación, el calor excesivo, dolor abdominal, gastroenteritis, acidez, estreñimiento, diarrea, intoxicaciones alimentarias y pérdida del apetito son algunos de los problemas más comunes durante los meses de verano. Conforme las temperaturas incrementan, el sistema digestivo se ralentiza y se vuelve más débil. Puedes acabar sintiéndote hinchada, cansada e incluso con náuseas. 

Ya vimos como unas vacaciones, alterar nuestros ritmos habituales, no matener nuestras rutinas podían tener un impacto en nuestro ciclo menstrual, os dejamos aquí el enlace por si os habéis pasado este articulo de nuestra nutricionista Maria Llamas y nuestra ginecóloga Laia Sanchez : Ciclo menstrual y vacaciones

Si ya sueles tener dificultades con tu sistema digestivo, el verano puede ser una pesadilla. 

A continuación te damos algunos consejos para mejorar tu salud digestiva durante el verano!

Consejos para mejorar tu salud digestiva durante el verano:

 

1. Come saludable

Echa un vistazo a tu alimentación porque cualquier cosa que comas tendrá un impacto en tu salud digestiva. 

Apuesta por verduras de hoja verde, tomates, sandía, pepino y piña, estos te mantendrán hidratada. Además no te olvides de las legumbres y los cereales integrales.

Recuerda que la fibra que obtenemos de las verduras y las frutas es esencial si quieres tener un sistema digestivo saludable. Cuando la digestión se ralentiza por el calor del verano, la fibra facilitará tu digestión.

 

2. Hidrátate

Una de las razones por las que el calor afecta a nuestra digestión es por la tendencia a deshidratarnos. Tu cuerpo está constantemente intentando mantenerte frío durante los meses de calor. Para conseguirlo, sudamos. Para recuperar el agua perdida con la sudoración, tenemos que beber agua de forma consciente para asegurarnos que no nos deshidratamos.

Una manera fácil de lograrlo es beber agua antes de que nuestro cuerpo nos envíe señales de que estamos sedientas. Esto hará que evites la hinchazón al beber agua de golpe y de forma desesperada cuando estás sedienta. 

Estar hidratada además te ayudará a mantener en equilibrio los fluidos corporales, a resolver problemas digestivos mejorando la absorción de nutrientes y también a mejorar el tracto intestinal. 

El agua de coco es muy recomendable pues nos aporta también minerales esenciales o puedes añadir trocitos de fruta y hierbas aromáticas para hacerla más atractiva. 

 

3.Evita alimentos picantes y ricos en grasa

Los alimentos picantes aportan calor y pueden ocasionar estrés digestivo. Este tipo de alimentos incrementan la probabilidad de sufrif acidez, hinchazón e incluso inflamación estomacal.

 

4. Evita tóxicos

Evita el café, el alcohol y los refrescos, estos ocasionan irritación estomacal y deshidratación, dificultando la digestión. Apuesta por infusiones que puedes tomar fresquitas, café de achicoria, kombucha o el agua de coco que he mencionado anteriormente.

 

5. Consume probióticos

El verano es una excelente época para comenzar a instaurar una buena rutina, incluso la de mejorar el sistema intestinal. Incorporar alimentos probióticos o incluso en suplemento te ayudará a aportar microorganismos buenos para los intestinos, pueden facilitar la digestión, mejorar el tracto intestinal además de ayudar a construir un sistema inmune fuerte. 

apuesta por consumir de forma diaria yogur y kéfir de cabra/ovega o de coco, pequeños sorbos de kombucha (te fermentado), una cucharada de chucrut en tus ensaladas…

 

6.Mastica

Si hace mucho calor, la idea de ir de un lado a otro como pollo sin cabeza, no es muy aconsejable. Tu cuerpo destina mucha energía intentando reducir la temperatura corporal. Esa energía la obtiene de dejar hacer otras cosas, como la digestión. Así que frena en todos los sentidos y especialmente a la hora de comer.

Corta tu comida en trocitos más pequeños y asegúrate de masticar muy bien cada bocado. Comer muy deprisa puede incrementar la probabilidad de que trages más aire con cada bocado y te hinches.

 

7. Muévete

Hacer ejercicio de forma diaria mejora tu digestión y tu bienestar. Eso sí, atenta con la franja horaria donde más apreta el calor, pues hacer ejercicios de alta intensidad a media mañana puede incrementar el riesgo de mareos, vómitos, nauseas e incluso infartos. Cuando sientas el mínimo síntoma, hidrátate!

De todas formas, esto no significa que no puedas hacer nada de ejercicio. Prueba a practicarlo a primera hora de la mañana o última de la tarde, practica ejerciciosm enos intensos pero que aun así ayudan a que las cosas se muevan en tus intestinos. Yoga, caminar, bailar o nadar son excelentes formas de mover el cuerpo.

 

8.Haz las paces con tu ritmo circadiano

Los días de verano son más largos, pero es importante mantener una buena rutina de sueño. Para evitar caer en patrones nada beneficiosos tienes que esforzarte y priorizar una hora sensata para irte a dormir, de tal forma que puedas dormir entre 7 y 9 horas.

Evita las pantallas y las luces brillantes por la noche para promover así la producción natural de melatonina y trata de exponerte a la luz natural al despertarte.

No es inhabitual además, que padezcamos trastornos tipo diarreas o estreñimiento cuando viajamos, visitamos païses exóticos o básicamente estamos fuera de casa, es decir, estamos fuera de nuestras rutinas…

Por eso no queria cerrar este artículo sin dejaros un tip para las descomposiciones, el estreñimiento o las digestiones difíciles:

  1. Disuelve una cucharadita de Kuzu en un poco de agua fría.
  2. Añade a un cazo con una taza de agua fría y coloca a fuego suave removiendo constantemente hasta que se vuelva transparente, en un par de minutos comenzará a espesar.
  3. Incorpora ½ cucharadita de pasta umeboshi y unas gotas de tamari.
  4. Mezcla bien y toma caliente. 

Recuerda que una buena salud digestiva es clave para mantener el equilibrio hormonal, existe una conexión directa entre la salud digestiva y tu ciclo menstrual, y tu ciclo menstrual es un signo vital como hemos comentado en muchas ocasiones, es por eso, que si notas que has normalizado tus problemas digestivos te informamos que desde Alma by Women podemos echarte una mano!

Escríbenos si tienes dudas en cómo podemos ayudarte!

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